Rajoy no da opciones a la remontada de Rubalcaba

Rubalcaba tira al aire su penúltimo cartucho, en el debate entre candidatos
El debate, organizado por la Academia de la Televisión celebrado esta noche en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid, moderado por Campo Vidal, nos ha permitido observar un cara a cara entre los candidatos del PP y el PSOE a la presidencia del Gobierno. Con un Rajoy actuando como presidente del Gobierno in pectore, y un Rubalcaba más agresivo y más nervioso conforme avanzaba el debate, se han podido conocer medidas concretas en materia de economía y empleo, políticas sociales y política exterior.
Estaba claro que el debate era mucho más determinante para el PSOE que va forzado en la intención de voto; si bien, el próximo presidente del Gobierno debe demostrar en estas lides su capacidad, por lo que ambos candidatos tenían que dar la talla para seguir aspirando a la presidencia. Rubalcaba buscó el cuerpo a cuerpo y la confrontación, mientras que Rajoy más sereno defendió su programa para salir de la crísis.
Política económica y desempleo

Rubalcaba se ha visto arrollado por la realidad económica y los datos expuestos por Rajoy y aunque el socialista ha intentado poner en la mesa su juego de cintura evitando responsabilizarse del gobierno del que formó parte, el popular no le ha dado oportunidad, con la serenidad de quien se ha preparado el examen, achacando al PSOE de Zapatero y Rubalcaba medidas económicas erróneas e improvisadas. Rubalcaba, insistente, buscó trasladar a Rajoy dudas sobre las políticas que realizaría en caso de resultar ganador el 20N y éste se extendió con propuestas y medidas que sacaron de quicio al candidato del PSOE.
Políticas sociales
Rajoy recordó la importancia del empleo para que el Estado recaude en la declaración de la RENTA y por tanto las políticas sociales pudieran financiarse e insistió en la desigualdad económica entre ciudadanos durante el periodo Zapatero/Rubalcaba. Rubalcaba, tras consulta con sus asesores en el corte publicitario, rebajó el tono agresivo y se vió obligado a explicar medidas destacando su vocación por la Educación y la Sanidad; aunque volvió a caer en el error de trasladar a Rajoy y preguntarle sobre lo que hará, lo que aprovechó Rajoy para presentarle los datos de aquellas medidas menos populares acometidas por Zapatero con Rubalcaba de ministro y donde rebajaron el presupuesto en Sanidad, con la congelación de las pensiones y la rebaja de los sueldos a funcionarios públicos. Rubalcaba se atascaba en la que se suponía su bloque más lucido, volviendo a acusar a Rajoy de medidas que el popular negó. Sobre las pensiones volvió otro rifirafe tras otra acusación de intenciones que solventó Rajoy con datos sobre los recortes en los presupuestos generales del Gobierno actual. Por un instante, Rajoy cayó en la interpelación trabada que le interesa a Rubalcaba que saldó destapando la estrategia del socialista al que acusó de realizar insidias y falsas acusaciones. Rubalcaba tomó aire escrutando el programa electoral del PP y utilizando la demagogia; aunque Rajoy cerró hablando de Educación, acusando a los socialistas de ser responsables de la mala calidad educativa en España y proponiendo alguna medida concreta. Rubalcaba cerró con un sospechoso primer plano en el que acusaba a Madrid de políticas educativas discriminatorias, a lo que respondió Rajoy que demostrara lo que decía.
Política exterior y democracia

Rubalcaba abrió recordando la ley del divorcio, la eutanasia, matrimonio homosexual. Rajoy comenzó su intervención como un próximo presidente abordando temas relacionados con el funcionamiento institucional estando presente medidas para salir de la crísis. Rubalcaba se encontró superado con este planteamiento e insistió sobre el matrimonio homosexual y se vió obligado a abordar la reforma institucional afirmando que eliminará las diputaciones provinciales, apelando a las vísceras sobre la importancia de la Mujer en la sociedad actual. Rajoy se mostró sensible sobre el asunto y de acuerdo sobre las políticas para favorecer la conciliación familiar, volviendo a defender la importancia de las Diputaciones como mecanismo de cohesión de los municipios, finalizó su turno recordando que ya había defendido la posición de regular las parejas de hecho. Con ambos contendientes como exministros de Interior, Rubalcaba cargó un último cartucho en el tema con el que pretendía rematar el bloque y le tendió una última trampa mostrando el único atisbo de humildad sobre política antiterrorista a lo que Rajoy le ganó por la mano mostrando de igual manera humildad "sea presidente del Gobierno o estando en la oposición", finalizando el candidato popular en materia de política exterior donde destacó el olvido hacia latinoamérica.
Intervención final
Rajoy se pregunta: ¿vamos a continuar con las mismas políticas económicas? y se contesta, "necesitamos el cambio y trabajaremos juntos para resolver el desempleo y poder desarrollar políticas sociales. No será fácil, un pais con tanta pérdida de empleo y dedicando sus recursos para pagar deuda"...
Rubalcaba: "Le pido a los ciudadanos que voten. Estamos pasando una situación muy complicada, seldremos con acuerdos"... "Sé que la situación es muy complicada y no tengo la respuesta para todos los problemas y he tratado de exponerles mis medidas".
En difinitiva, los contendientes se han mostrado conforme a lo esperado y donde uno ha mostrado fiabilidad programática para salir de la crísis y el otro ha querido abanderar las políticas de izquierdas menospreciando a otras fuerzas políticas. Rajoy seguro en la defensa de las políticas sociales basadas en la creación de empleo y Rubalcaba asegurando su suelo electoral levantando el ánimo de sus militantes. En cualquier caso, uno visceral y el otro cerebral. Rubalcaba rehuyendo su responsabilidad en el actual gobierno y Rajoy proponiendo como próximo presidente. Uno haciendo un llamamiento al voto a su decepcionado foro y el otro quitando dudas ante las acusaciones. Uno gesticulando y parpadeando en exceso y otro leyendo con más frecuencia para aportar datos. Rajoy impide un titular que permita el ataque en la prensa contraria y Rubalcaba intentó trasladar sus ideas fuerza para su electorado. Se evitó el asunto de la corrupción política, lo que hubiera favorecido a otras fuerzas políticas; así como la reforma de las autonomías o del poder judicial.
En resumen Rajoy se afianza en la carrera electoral y Rubalcaba deja pasar la oportunidad para un vuelco electoral.